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Un café con Emilio Gilolmo, presidente de FCE por ZERTIOR

Nos tomamos un café con Emilio Gilolmo, actual presidente de la Fundación Chile-España y «veterano» de grandes multinacionales como La Caixa o Telefónica. También ha ejercido durante años la vida diplomática y ahora nos cuenta cómo es su vida y cómo ve el futuro más inmediato.

En primer lugar, ¿Quién es Emilio Gilolmo?

Soy abogado de formación y he sido director de Relaciones Externas e Internacional del Banco Urquijo, director general del Banco Hipotecario de España y de la Caixa de Barcelona en Madrid.

He sido presidente de Telefónica en Chile y responsable de Relaciones Institucionales para Latinoamérica, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Telefónica y vicepresidente de la Federación Española de Defensa y Protección de los Derechos Humanos. Actualmente soy presidente de la Fundación Chile-España.

Hablando de la Fundación Telefónica… llevaron a cabo importantes labores, entre otros temas, a nivel educativo. ¿Con qué se queda de esta etapa?

De ella destacaría que la única manera de llegar a todos con la educación es a través de la tecnología, para lo que es muy importante la formación profesional y la educación dual, y para ello se han destinado importantes recursos materiales y humanos.

¿Cuándo decide que Latinoamérica es la región del mundo en la que quiere desarrollar su carrera?

Respondí afirmativamente cuando me lo propuso el presidente de la Compañía.

Y ahora es presidente de la Fundación Chile-España. ¿Cómo definiría esta organización y cuáles son sus principales objetivos?

Efectivamente, soy presidente de la Fundación Chile-España (FCE) desde diciembre de 2016 y es un honor presidir una fundación tan dinámica y multifacética como esta.

El principal objetivo de la FCE es incrementar el intercambio económico, cultural, académico- científico y social entre Chile y España a través del desarrollo de actividades que fomenten la cooperación, el intercambio de experiencias, las oportunidades de inversión y negocio, el emprendimiento y la innovación tecnológica.

Para ello, contamos con patronos y colaboradores que representan los sectores más relevantes de la actividad económica e instituciones académicas con una larga trayectoria en el impulso del conocimiento, todas ellas comprometidas con la realización de proyectos que buscan promover las relaciones bilaterales, contribuir a un crecimiento sostenido y afianzar la imagen de Chile en España.

El Covid-19 nos ha obligado a reinventarnos y en estos momentos, estamos enfocados en los encuentros on-line, que nos permiten seguir manteniendo las relaciones con Chile y llegar a un público mucho más amplio. Tenemos en marcha 3 ciclos de webinars que organizamos en colaboración con KREAB, KIM y ZERTIOR. El primero se centra en la economía global, el segundo en innovación y el tercero en industrias creativas y del entretenimiento. Estas iniciativas buscan presentar las oportunidades y desafíos a los que nos enfrentamos en la actualidad, y cuenta con expertos de distintos ámbitos, siempre a la vanguardia de la tecnología, la innovación y la realidad económica.

Por otro lado, a través de nuestras RRSS y web estamos dando a conocer todas las acciones que nuestros patronos y colaboradores están realizando para combatir la pandemia a través del #FCEorgullosadesusempresas.

Más allá del lingüístico y cultural, ¿qué más puntos tienen en común Chile y España?

Como bien indica, el idioma y la cultura son dos de los puntos fuertes que unen a Chile y España. El español se ha convertido en el segundo idioma más hablado del mundo por más de 577 millones de habitantes a ambos lados del Atlántico, y en el mayor representante de la cultura iberoamericana.

No es casualidad que algunos de los poetas más renombrados de Chile hayan permanecido largo tiempo en España, como lo hicieron Vicente Huidobro, Gabriela Mistral y Pablo Neruda.

Además, en las dos últimas décadas, tres de los escritores más destacados del país andino, Jorge Edwards, Gonzalo Rojas y Nicanor Parra, han recibido el Premio Cervantes, la más alta distinción de las letras españolas, y recientemente Raúl Zurita acaba de recibir el premio Reina Sofia de poesía Iberoamericana.

En cuanto a las relaciones bilaterales entre ambos países, estas se caracterizan por un alto nivel de entendimiento. Chile es una de las economías más sólidas de América Latina, gracias a su crecimiento sostenido y seguridad jurídica que hacen posible un marco excelente para la inversión y el intercambio comercial, siendo ambos países una plataforma segura hacia terceros mercados, ya que Chile en concreto cuenta con 28 acuerdos comerciales con 64 economías, las cuales representan el 86% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, equivalente a casi dos tercios de los consumidores del mundo.

Prueba de ello, es la importante inversión española en Chile, que actualmente alcanza a las 1.500 empresas españolas y a una considerable migración de ciudadanos españoles a Chile. Las inversiones responden al interés de grandes empresas de servicios, así como de pequeñas y medianas empresas, que participan en el desarrollo de los sectores de infraestructuras, servicios financieros, consultorías, comunicaciones, agua y electricidad, energías renovables, TICs, logística, salud y bienestar, actividades vinculadas al turismo, etc.

Ese puente, el hispano-chileno, fue cruzado por Zertior hace ya varios años y la compañía ya está plenamente asentada a ambos lados del Atlántico. ¿Cómo conoció Emilio Gilolmo a Zertior y qué destacaría de la empresa?

Tuve el honor de conocer a Zertior en el año 2018, cuando se incorporó a la Fundación Chile- España y desde entonces solo tengo buenas palabras para esta gran empresa. La capacidad creativa del equipo que tiene detrás ha logrado tener una magnifica trayectoria, que no para de crecer, tanto en España como en Chile.

Son referentes en la prestación de servicios globales de la industria del deporte y del entretenimiento y se han sabido adaptar rápidamente a la situación que estamos viviendo como consecuencia de la pandemia. No cabe duda de que el confinamiento ha provocado un cambio radical en la manera en que la mayoría de la población disfruta del ocio y el entretenimiento, y Zertior siempre encuentra productos imaginativos para ofrecer a sus clientes.

También ha sido observador internacional de la ONU y la UE, participando en misiones en países como Camboya, Líberia o Bosnia y Herzegovina. ¿Con qué se queda de esa etapa?

Son tantas las experiencias y tan variadas que es difícil quedarse “solo con algo”. Pero podría destacar dos paradigmas contrapuestos: el odio radical y destructivo que observé en Bosnia- Herzegovina (Ivo Andric dijo que en su país había desaparecido todo menos el odio) y el espíritu de concordia y de superación de viejos enfrentamientos que pude apreciar en Suráfrica, con el fin del apartheid y el triunfo de Mandela (quizás la persona que más he admirado).

¿En qué posición ve a Chile y a España ante la pandemia por coronavirus a nivel empresarial?

No cabe duda, de que ambos países se están viendo fuertemente afectados por la pandemia del coronavirus y que como indican los organismos internacionales, nos adentraremos en una crisis financiera sin precedentes y global.

Sin embargo, desde un punto de vista positivo, en España es importante destacar las redes de Telefónica que han demostrado su robustez y fiabilidad ante picos de tráfico sin precedentes, en un contexto en el que tanto la conectividad como la digitalización de las diferentes estructuras sociales, económicas y sanitarias, han resultado ser críticas. Esta crisis va a acelerar la digitalización de la sociedad de forma irreversible.

En Chile, a pesar del impacto del Covid-19 en la economía, el flujo de inversión extranjera directa (IED) que recibió Chile entre enero y junio de este año alcanzó los US$9.801 millones, un incremento de 53% respecto al mismo período del año, según las cifras provisorias informadas por el Banco Central. Más inversión extranjera se traduce en la permanencia de proyectos en Chile, en el desarrollo de nuevas iniciativas y especialmente importante, en más empleo, que es lo que los chilenos necesitan y que les ayudará a la recuperación de la economía.

Precisamente esa pandemia ha hecho que cambiemos algunos hábitos laborales, como el de las reuniones, cursos etc. En este sentido, ahora se están impulsando los webinar como solución a la formación de una manera online. Hace poco usted mismo participó de manera directa en uno organizado por la Fundación Chile España y Zertior sobre esports y Fan Engagement, que es el primero de una serie que se prolongará en el tiempo ¿Qué aporta esta nueva forma de entender los seminarios y qué destaca de la propuesta de la FCE y Zertior?

La crisis sanitaria ha paralizado parte de la actividad económica, afectando duramente a las Industrias Culturales, Creativas (ICC) y del entretenimiento, las cuales han tenido pérdidas millonarias por la cancelación de espectáculos, conciertos, festivales, encuentro deportivos, y un largo etcétera.

Las ICC que representan la llamada “Economía naranja” se encuentran entre los sectores de más rápido crecimiento en el mundo. Según la UNESCO, el sector de la cultura y los bienes o servicios directamente relacionados con la creatividad representan actualmente el 3% del PIB mundial.

Genera 2.250 millones de dólares de ingresos anuales y casi 30 millones de puestos de trabajos en todo el mundo.

El ultimo webinar que hicimos con Zertior sobre Esports y Fan Engagement, con dos ponentes de primerísimo nivel como son Alfonso Verdugo, head of Firesports, y Juan Pablo Pareja, director general del Club Universidad Católica de Chile, puso de manifiesto que el ecosistema de los e-Sports en todo el mundo alcanzara los 1.100 millones de dólares en 2020, lo que supondría un crecimiento interanual de un 15,7 % respecto a los 950 millones que se han ingresado en 2019. Por tanto, no cabe duda de que es una gran oportunidad que todas las empresas deberían valorar con atención, no solo para optimizar la comunicación y poder conectar con audiencias más jóvenes e innovadoras, sino también reforzar su posicionamiento y el retorno de sus inversiones.

Su dilatada experiencia internacional, en la que se han producido grandes cambios a nivel mundial, le convierte en una voz autorizada para contestarnos esta pregunta: ¿cómo cree que será el mundo post-Covid?

Carezco de bola de cristal, aunque soy un experto, de reconocido prestigio internacional en prever el pasado. En todo caso creo que será un mundo más precavido y miedoso.

Seguramente, como persona inquieta, será de los que no se “retire” nunca, pero ¿qué tiene pensado hacer cuando tenga más tiempo libre?

Leer más libros, oír más música, escribir “mis recuerdos” para mis hijas y mis nietos y, si nos deja el Covid, viajar un poco más, pues solo he visitado 56 países y hasta los 190 me queda mucho por hacer.

 

Fuente: http://zertior.com/blog/entrevista-emilio-gilolmo-fce/